lunes, 20 de diciembre de 2010

Ultimo eclipse de luna del año


El último eclipse del año será el próximo 21 de diciembre, en coincidencia

con el solsticio de verano. Se trata del primero total de Luna después de

casi tres años, en los que sólo hubo eclipses lunares parciales.

A diferencia del anterior eclipse total de Luna, que se produjo el 20 de febrero

de 2008 y que pudo observarse aquí en todo su desarrollo por encima del

horizonte, en la Argentina éste sólo será visible en su primera fase.

Eclipse viene del griego "ekleipsis", que significa desaparición. Sin embargo,

la Luna no se borra, y en esto la atmósfera terrestre tiene una influencia vital:

debido a la luz refractada por la atmósfera, la Luna no desaparece sino que

adquiere un característico color rojizo brillante.

Sin embargo, los expertos sostienen que el eclipse de este martes

probablemente sea más oscuro que otros anteriores, pues en la atmósfera

aún perduran los efectos de la reciente erupción del volcán del Monte Merapi,

en Indonesia, lo que influirá para que la Luna eclipsada adopte tonos marrones.

El eclipse de Luna del 21 de diciembre tendrá una magnitud de 1,257,

tres veces superior al parcial del pasado 26 de junio, y será visible en todas

sus fases en América del Norte y Central, Groenlandia, Islandia y noroeste

de Sudamérica.

En Europa, oeste de Africa, este de Asia y sudeste de América del Sur,

incluida la Argentina, su visibilidad será reducida, ya que en unos se verá

el comienzo y en otros el fin del eclipse, pero no su fase central.

En algunos lugares como México, Alaska o Hawaii, el primer contacto se

realizará cuando todavía no haya llegado la medianoche, o sea, aún será

el día 20.

En la Argentina podrá apreciarse el primer contacto con la penumbra el 21

a las 2.29,4 hora local; una hora más tarde, el primer contacto son la sombra;

y a las 4.40, el inicio de la totalidad.

Pero el centro del eclipse (5.17,0), el fin de la totalidad (5.53,2), el último

contacto con la sombra (7.01,4) y el último contacto con la penumbra (8.04,5),

no serán visibles debido a que a esa hora la Luna habrá desaparecido

del horizonte local.

La zona de sombra del eclipse tendrá un diámetro equivalente a unas

tres veces el de la Luna, y el cono de penumbra será cinco veces mayor

que el satélite.

Esto implica que el eclipse penumbral durará poco más de cinco horas y

media, el eclipse umbral casi tres horas y media, y el eclipse total una hora

y 12 minutos.

Un eclipse lunar sucede cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna,

es decir, cuando la Luna entra en la zona de sombra de la Tierra, lo que sólo

puede ocurrir en la fase de Luna llena.