interpreto que esto sucedió, luego de las elecciones y decidieron acomodar a la poblacion,..estos estan locos! , como vas a agredir a alguien asi, y no estaban a cara descubierta, la cara principalmente es de sus politicos y en segunda de la policia, todos pertenecen al mismo pueblo , no lo entienden,...la Argentina fue victima y sigue siendo de este tipos de episodios, ...el pueblo argentino se solidariza con el pueblo de españa...un abrazo grande para los que piensan que esto todavia se puede cambiar.
CATALUÑA | Reacción masiva de los barceloneses
La dureza policial multiplica la indignación en Barcelona
"Ahora somos más fuertes". Una pancarta resume el sentir de unos manifestantes que han decidido teñir sus manos de blanco, que empuñan flores y propugnan la resistencia pacífica como vía para evitar que un nuevo operativo policial pueda desalojarles definitivamente.
Ya ha advertido el consejero de Interior de la Generalitat, Felip Puig, de que en las próximas horas no está prevista otra actuación de los Mossos, pero ésta se antoja de todos modos imposible dada la magnitud de la masa que copa el corazón de Barcelona.
"Miedo y asco". "Orden no es sumisión". "Ellos quieren la plaza, nosotros la democracia". "Vuestras porras nos dan razones". Se suceden los golpes al estómago del máximo responsable de los agentes autonómicos que ya ha recibido miles de demandas de dimisión desde las redes sociales y que las encuentra también a pie de plaza en uno de los cientos de carteles que coronan las jaimas que ya se han vuelto a instalar. "Puig se te ha acabado la impunidad", pregona uno de ellos. Otro reza: "Políticos no habéis entendido nada" y los que bajo el lema transitan dotan de veracidad a la proclama al expulsar de la manifestación, gritos mediante, al presidente de ICV, Joan Herrera, que había decidido acudir a dar apoyo a la concentración.
Se rebela Barcelona. Maderos, cartones se acumulan en los márgenes de la plaza. Toldos cubren los espacios reservados para las comisiones y tratar de transitar entre el gentío es hazaña. La indignación se multiplica y resta sentido a la actuación policial iniciada al alba, antes de que la noche se cierna sobre la ciudad.
A horas de que la asamblea tomara la voz, ya adelantaban los portavoces anónimos -en una comparecencia sin precedentes desde el inicio de la acampada- que difícilmente saldrán de la plaza antes del domingo, como estaba previsto. Mantienen que tenían y tienen los "riesgos controlados" ante lo que se pueda avecinar si el Barcelona se impone en Wembley y reclaman que Puig y toda la cadena de mando de los Mossos dimitan, que las pelotas de goma no vuelvan a dispararse y que los antidisturbios vayan identificados en adelante.
El quejido conquista de nuevo el epicentro de la protesta, en forma de la más colosal cacerolada primero, de intenso debate después y, entre patrullas de lateros, al fin, de celebración, de festejo 24 horas antes de lo planeado por hordas de barcelonistas y grupúsculos de alborotadores.
Un desalojo de “indignados” dejó 121 heridos en Barcelona
28/05/11 Ocurrió cuando la policía intentó vaciar la plaza principal de la ciudad, ocupada desde hace 12 días, y acabó reprimiendo a bastonazos. Anoche, 5.000 personas volvieron a ocupar el lugar. Hay presiones para despejar Puerta del Sol en Madrid.
PorJUAN CARLOS ALGAÑARAZ
MADRID. CORRESPONSAL
Un desproporcionado uso de la fuerza por parte de la policía autónoma catalana, que el movimiento de los “indignados” calificó como “brutalidad policial” , desalojó parcialmente ayer a los acampados en la Plaza de Cataluña que poco después recuperaron el ámbito de su protesta. Hubo 121 heridos, dos detenidos, dos jóvenes con fracturas y una reacción “indignada” que ha devuelto las fuerzas al movimiento y que anoche llenó otra vez las plazas, sobre todo en la madrileña Puerta del Sol.
Después de las elecciones del pasado domingo 22 de mayo, la asistencia a las acampadas y protestas había decaído, pero las cargas policiales contra gente desarmada y pacífica ha tenido un “efecto de llamada”. El episodio se produjo luego de que el gobierno pretendiera limpiar la plaza catalana para que estuviera preparada para los festejos si el Barcelona gana hoy la copa Champions ante el Manchester United. En Madrid, a su vez, los acampados en la Puerta del Sol hicieron llegar de inmediato su solidaridad con sus compañeros de la capital catalana, pero también manifestaron su temor de que el gobierno ordenara un desalojo de la célebre plaza en respuesta a las presiones de los comerciantes del lugar y del opositor Partido Popular, que reclamaba la disolución de la concentración.
Para esta movilización en toda España, los “indignados” han vuelto a su medio de comunicación favorito: las redes sociales en Internet. La “nube” ha sido otra vez utilizada a nivel internacional para denunciar la represión policial, a once días de que comenzara el movimiento que exige un cambio social y político en el país.
La excusa para la acción represiva en la Plaza de Cataluña, ordenada por las autoridades del gobierno catalán, es que se iba a limpiar la zona y a quitar objetos peligrosos por “seguridad y orden público”. Al principio, los acampados se limitaron a levantar sus brazos y agitar sus manos vacías al tiempo que gritaban: “¡Estas son nuestras armas!”. La carga policial rodeó a los acampados que permanecieron sentados sin enfrentar a los guardias. Mientras tanto, piquetes de limpiadores municipales comenzaban a levantar todos los objetos del campamento y depositarlos en tres caravanas de treinta camiones en total. Allí fueron a parar los ordenadores, carteles, comidas, sacos de dormir, cacerolas y carpas que se amontonaron en los vehículos. Numerosas personas solidarias habían acudido a la Plaza, pero la policía la cercó con vallas y no los dejaron ingresar. Entonces varios grupos de muchachos y chicas comenzaron a sentarse ante los camiones de limpieza. Fue ése el momento en que los “Mossos d’Escuadra”, la policía catalana,atacaron con porras a los resistentes y se produjeron los primeros heridos y contusos.
Las violentas escenas que se registraron, con los jóvenes aporreados en el suelo, provocaron la indignación de todos y también de la oposición al gobierno tripartito de izquierda que gobierna Cataluña. El vocero de la Generalitat (gobierno catalán), Frances Homs, aseguró que los “indignados” podrán volver y continuar con su protesta pero que debía quedar asegurada la limpieza y el retiro de objetos que puedan ser utilizados hoy si triunfa el Barcelona en la final de la Liga de Campeones en el estadio de Wembley, en Londres.
Tras la represión, la policía se retiró y los jóvenes se precipitaron pasado el mediodía a volver a la Plaza para armar otra vez la acampada. Anoche, según cálculos de agencias periodísticas y otros medios españoles, al menos 5.000 personas habían copado la plaza en el corazón de la capital catalana. A las 21 hora local, un enorme estruendo puso en marcha una multitudinaria “cacerolada”.
En Madrid, en tanto, cundían temores entre los “indignados” que acampaban y se manifestaban en la “República de Sol” de que se repitiera una operación policial como la que tuvo lugar en la plaza de Barcelona.
Un chaparrón muy intenso que cayó durante media hora inundó carpas y afectó a las grandes lonas azules que protegen a los manifestantes de la lluvia y el sol. Los comerciantes de la zona volvieron a reclamar que se actuara contra los “indignados” porque se están arruinando por la caída de la clientela. Después de entrevistarse con las autoridades de la Comunidad de Madrid, su presidente Esperanza Aguirre reiteró al Ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba el pedido de que disolviera a los “indignados”. El ministro anunció que va a estudiar este reclamo con la policía .
Mientras llegaba la noche, también se unían a la demostración muchas personas que habían contemplado la represión en Barcelona que fue seguida con mucho despliegue por los medios de comunicación. Voceros de la concentración insistieron anoche ante los periodistas que su protesta era “cívica y pacífica”.
Rechaza el bipartidismo y plantea que el poder está ejercido “a través de una dictadura partidocrática que encabezan las históricas siglas del socialdemócrata PSOE, hoy oficialista, y el conservador PP, hoy en la oposición.
Repudia una ”máquina destinada a enriquecer a una minoría que no sabe ni de nuestras necesidades”.